Gordon Ramsay expulsa al gobernador de Minnesota, Tim Walz, de Hell’s Kitchen después de un acalorado intercambio sobre el menú “Woke”.
En un dramático giro de los acontecimientos, el famoso chef Gordon Ramsay se enfrentó al gobernador de Minnesota Tim Walz durante un episodio especial de Hell’s Kitchen, lo que desató una gran controversia en las esferas culinarias y políticas. Ramsay, conocido por su actitud sensata y su temperamento fogoso, supuestamente echó a Walz de la cocina después de una acalorada discusión sobre el menú del programa, que el gobernador criticó como “políticamente incorrecto” y ambientalmente insostenible.
El episodio, en el que se invitó a celebridades y figuras políticas a poner a prueba sus habilidades culinarias, pretendía ser una noche de competencia amistosa. Sin embargo, las tensiones aumentaron cuando el gobernador Walz expresó su preocupación por algunos de los platos que se servían. Según los informes, Walz se mostró en desacuerdo con el menú con mucha carne y sugirió que la cocina debería adoptar opciones más sostenibles y basadas en plantas.
“Tenemos que pensar en nuestra huella de carbono y tomar decisiones responsables”, dijo Walz, señalando los cortes de carne. Los comentarios del gobernador no le sentaron bien a Ramsay, quien respondió de inmediato. “¡Esto es Hell’s Kitchen, no una guardería para personas con conciencia social! ¿Quieres salvar el planeta? Bien, ¡pero no lo hagas en mi cocina, idiota!”.
Los testigos afirman que, cuando la discusión se intensificó, Ramsay ordenó a su personal que tirara todos los ingredientes de origen vegetal de la cocina, gritando: “¡Nadie se hará vegano bajo mi supervisión!”. A pesar de los intentos de Walz de volver a dirigir la conversación hacia la sostenibilidad y el medio ambiente, Ramsay no estaba dispuesto a aceptarlo. “¡Esto es Hell’s Kitchen, no su mitin de campaña política! Han convertido esta cocina en una broma”, espetó Ramsay.
La situación llegó a un punto crítico cuando Walz sugirió reemplazar la mantequilla con aceites vegetales y usar utensilios biodegradables. Ramsay, visiblemente furioso, golpeó una espátula contra la encimera y gritó: “¡Sal de mi cocina, te despertaste, pervertido!”. El gobernador fue escoltado hacia la salida por los productores, que abandonaron la cocina en un silencio atónito.
Tan pronto como se emitió el episodio, las redes sociales estallaron con reacciones a la confrontación. El hashtag #WokeCreep comenzó a ser tendencia en cuestión de horas, y los fanáticos de Ramsay elogiaron al chef por enfrentarse a lo que consideraban una corrección política que se infiltraba en el mundo culinario. “Por eso amamos a Ramsay: ¡no deja que nadie arruine su cocina con tonterías progresistas!”, tuiteó un fan. Otro agregó: “Mantengan la política fuera de la cocina. ¡Ramsay tiene razón!”.
El gobernador Walz, que no se queda callado, recurrió a Twitter a la mañana siguiente para defender su postura. “La experiencia de anoche en Hell’s Kitchen demuestra que todavía tenemos un largo camino por recorrer en la implementación de prácticas de cocina sostenibles y responsables”, tuiteó Walz. “No me disculparé por defender lo que es correcto, incluso en la cocina. El planeta importa y seguiré luchando por eso, sin importar cuántas veces me echen”.
Ramsay, que nunca se amilana ante los enfrentamientos en las redes sociales, respondió rápidamente: “Que conste que estoy totalmente a favor de la sostenibilidad, pero no en mi cocina cuando intento organizar un concurso de cocina. Dejemos la política al margen y centrémonos en lo que importa: preparar buena comida”, tuiteó Ramsay. “Y si Tim Walz quiere volver a intentarlo, tendré muchas opciones basadas en plantas esperándolo, en la basura”.
La respuesta de Ramsay rápidamente obtuvo decenas de miles de “me gusta” y retuits, y los fanáticos aplaudieron su postura sin complejos de mantener las agendas políticas fuera de la cocina.
Este enfrentamiento de alto perfil entre Gordon Ramsay y Tim Walz ha provocado un debate sobre el papel de la política en el mundo culinario. Mientras que algunos sostienen que la sostenibilidad y las cuestiones medioambientales deberían estar a la vanguardia de la cocina moderna, otros creen que la corrección política no tiene cabida en la cocina. De todos modos, los fans de Ramsay esperan con impaciencia el próximo episodio, preguntándose si otra celebridad o político se atreverá a desafiar al famoso y fogoso chef.
Por ahora, no está claro si Ramsay seguirá invitando a figuras políticas a Hell’s Kitchen, pero una cosa es segura: cualquiera que intente llevar la política a la cocina de Ramsay se enfrentará a un duro golpe.
El enfrentamiento entre Gordon Ramsay y Tim Walz en Hell’s Kitchen ha encendido un acalorado debate, mezclando los mundos de la cocina y la política de una manera que pocos esperaban. La feroz defensa de Ramsay de su cocina y su desdén por lo que él llama “tonterías progresistas” ha tocado la fibra sensible de muchos, mientras que el enfoque de Walz en la sostenibilidad ha suscitado tanto elogios como críticas. A medida que se asienta el polvo, queda claro que Ramsay no tiene intención de permitir que las agendas políticas se apoderen de su cocina, y cualquiera que lo intente podría encontrarse con que le muestran la puerta, al igual que el gobernador Walz.