La historia de Lauren Wasser es una historia de tragedia inimaginable y de resiliencia increíble. A los 24 años, Lauren llevaba una vida activa y plena, modelando y jugando al baloncesto.
Sin embargo, en 2012, su vida dio un giro dramático cuando desarrolló el síndrome de shock tóxico (SST) después de usar un tampón, un producto que millones de mujeres usan diariamente sin incidentes.
A pesar de usar el tampón correctamente, cambiándolo cada cuatro horas como se recomienda, la vida de Lauren cambió para siempre por esta rara pero grave infección bacteriana.
La llevaron de urgencia al hospital, donde los médicos lucharon por salvarle la vida. Solo después de realizarle pruebas exhaustivas se identificó la causa de su enfermedad: el síndrome de shock tóxico, una afección causada por la liberación de toxinas a partir de un crecimiento excesivo de la bacteria Staphylococcus aureus (estafilococo), que puede estar asociada al uso de tampones.
Despertar ante esta nueva realidad fue devastador para Lauren. Había perdido ambas piernas y, con ellas, su identidad como atleta y modelo.
Sin embargo, en lugar de permitir que esta tragedia la definiera, Lauren decidió redefinirse. Estaba decidida a volver a caminar y, tras meses de rehabilitación y de aprender a usar prótesis, no solo recuperó su movilidad, sino que también volvió a modelar, desafiando todos los pronósticos.
En la actualidad, Lauren no es solo una superviviente, sino un modelo a seguir. Ha vuelto a modelar, desfilando por pasarelas y apareciendo en importantes campañas de moda, desafiando los estándares de belleza de la industria. Su historia es una historia de resiliencia, fortaleza y el poder del espíritu humano para superar incluso las circunstancias más devastadoras.
La experiencia de Lauren es un duro recordatorio de los riesgos asociados al uso de tampones, incluso cuando se utilizan correctamente. Subraya la importancia de la educación, la concienciación y la defensa de los derechos de las mujeres para garantizar que estén informadas sobre los productos que utilizan y los posibles peligros que pueden entrañar.
A través de su defensa, Lauren continúa inspirando a otros, convirtiendo su dolor en un propósito que va más allá de su historia personal para impactar la vida de muchos otros.